El tarot es una disciplina muy antigua, que si bien hay diversas teorías acerca de su origen, lo que sí se sabe es que sirve para ayudar a las personas a encontrar su camino, cuando se encuentran perdidas. En el mundo del tarot existen diversos modos de interpretarlo, y uno de ellos es el tarot egipcio. ¿Quieres saber cómo funciona? Te lo contamos.
Historia del tarot egipcio
El origen del tarot egipcio es muy antiguo, por lo que existen varias teorías acerca de cómo se creó. Hay quien atribuye el origen de estas cartas a Hermes Trimigesto, persona que creó las imágenes para que el arte de adivinación se propagara. Según esta teoría, las cartas del tarot egipcio fueron las primeras que se crearon con el fin de adivinar el futuro.
Por otra parte, hay quienes defienden que este tipo de tarot fue tomado del Libro de Toth y se traspasó a las cartas. Toth es el dios de la sabiduría, por eso, este tarot era consultado por los faraones, quienes con la ayuda de los sacerdotes interpretaban los astros para saber más acerca de su porvenir. De hecho, se piensa que gracias a estas consultas, los faraones consiguieron esa ventaja frente al resto de culturas.
Una vez entró el tarot egipcio en Europa, comenzó a transformarse al tarot más conocido, el tarot de Marsella. Hoy en día, es el que más se utiliza y en el que todo el mundo piensa al hablar de tarot. Para su mutación se eliminaron algunos elementos complejos y se introdujeron otros, que facilitan la interpretación.
La baraja del tarot egipcio
Cada una de las barajas de este tarot está compuesta por 78 cartas, que están divididas en Arcanos Mayores y Arcanos Menores. Estas cartas representan la vida humana con todo lo bueno y lo malo que existe en este camino. Estos arcanos se entienden como secretos misterios, por lo que cada uno de ellos esconde un secreto que debemos resolver por medio de la interpretación. Cada arcano lleva un mensaje, puede ser un dato, un consejo o incluso una advertencia.
Los Arcanos Mayores son los secretos más grandes y representan personajes y escenas que están cargados de simbología. 22 cartas conforman estos Arcanos Mayores, siendo los más importantes a la hora de interpretar el tarot egipcio. Por lo que respecta a los Arcanos Menores, los conforman las 56 cartas restantes y representan lo más cotidiano, son los secretos más pequeños.
¿Cómo se interpreta el tarot egipcio?
Aprender a los pasos para leer el tarot no es cosa de broma, pues requiere de una gran cantidad de conocimientos y habilidades que no son fáciles de obtener. De hecho, la persona que interpreta las cartas no tiene que memorizar datos ni adivinar el futuro. El tarotista tendrá que entender la simbología que encierra cada una de las cartas, y deberá interpretarlo de modo que ayude a la persona a crecer en su vida.
Si la persona que lee las cartas no está familiarizada con el proceso o no entiende bien cada símbolo oculto, la lectura no servirá de nada, es más, podría llegar a hacernos daño. Por eso, es importante que, a la hora de consultar el tarot, nos cercioremos de que contamos con un profesional.
Un ritual que suele ser muy habitual es el de elegir 4 cartas. La primera de ellas se corresponde al presente del que consulta, mientras que la segunda habla del futuro. La carta número 3 nos habla de nuestras ideas, lo más íntimo y psicológico. Por última la cuarta carta será la que responda a la pregunta planteada por el consultante.