Una crítica constructiva pretende ayudar a la persona a salir de sus errores, pero sin olvidar recalcar también sus aciertos. ¿Sabes cuál es la clave para lograr buenos resultados?
Hablar con serenidad, no hay nada peor que criticar con enojo, pues aún cuando tengas razón, solo lograrás crear un conflicto y alterar a la persona criticada.
Conoce cómo han sucedido los hechos. Quizá son solo diferentes modos de pensamiento, donde no hay lugar a equivocaciones, tan solo enfoques subjetivos de un mismo hecho.
Sé concreta al lanzar una crítica. Refiérete al momento exacto y no divagues con términos como 'frecuentemente'
o 'hace unas semanas'. Es mejor mencionar cual fue el error, pero dando ejemplos de cómo poder mejorar.
La tensión de la charla puede bajar si en medio de ella haces una autocrítica de tus propias fallas, y las tomas como base para sugerir posibles soluciones.
Recuerda, el éxito de la charla empieza en el origen de tu motivación.