Con el paso del tiempo nuestra piel, músculos y órganos van perdiendo colágeno, elastina y tono. Es importante aprender a trabajar los músculos de la cara de la manera adecuada, por esa razón recopilamos esta serie de ejercicios de gimnasia facial para rejuvenecer el rostro.
Así como realizamos ejercicios saludables para el cuerpo, podemos aprovechar las bondades de la gimnasia para mantener joven la piel de nuestro rostro. Con estos fáciles ejercicios de gimnasia facial podrás devolverle a tu rostro algunos años de juventud y si todavía no tienes ningún signo de vejez, con la gimnasia facial puedes retrasar la aparición de arrugas con simples ejercicios. Porque el cuidado facial nos importa, y mucho.
¿Cómo ejercitar el rostro para mantenerlo joven?
El libro la Gimnasia facial de Catherine Pez, menciona que las mujeres deben practicar el ejercicio hasta que el músculo se caliente. Es decir, cuando al masajearlo produzca calor.Al principio es mejor hacerlo frente al espejo. Y luego, cuando te vas haciendo experta no lo necesitarás.
Una realización constante de estos ejercicios faciales ayudarán a mantener joven nuestro rostro:
1. Relajación de los músculos
Para hacer ejercicios de gimnasia facial es importante tensar los músculos de la cara. Realiza una leve presión con las manos, formando el puño debajo de tus mofletes durante unos 10 segundos.
Realiza pequeños masajes en el área en forma de circulo, para subir la piel de tu rostro y darle juventud. Para terminar debes ir abriendo la boca de forma suave, mientras vas abres y cierras los ojos, esto consigue relajar tu ovalo facial. Sigue pequeños consejos que te ayuden a recuperar la elasticidad de tu rostro.
Este ejercicio es necesario siempre, para comenzar la rutina de gimnasia facial, como un precalentamiento. De esta forma, los músculos se calientan y reciben la oxigenación necesaria. Luego lo repites al terminar la rutina para eliminar la tensión. Vas a realizar 1 minuto al comenzar y al terminar.
2. Adiós a la molesta papada
La papada es algo que a todas nos horroriza y nos pone años de más. Sigue este ejercicio para mantener tu mentón más terso.
Para realizar este ejercicio debes colocar los puños debajo de la barbilla, realizando presión hacia la parte de arriba. Mientras que realizas esa acción debes empujar la lengua presionándola hacia el paladar y vas a realizar una fuerza en la boca como si la fueras a abrir.
Has de hacer este ejercicio durante 20 segundos aproximadamente y luego repítelo tres veces pero en distintas zonas del mentón.
3. Ejercicio para definir los pómulos
Este ejercicio es clave para lucir unos pómulos firmes y con una forma natural de mujer joven. En este ejercicio vas a utilizar los dedos índices y el dedo corazón, los debes apoyar bajo un pómulo primero. Debes hacer un poco de presión mientras que van levantando suavemente.
Luego vas a ir desplazando los dedos con la misma presión por los pómulos. Realiza el ejercicio varias veces durante 7 segundos en cada zona. Completa el recorrido hasta finalizar en el área de la sien. Puedes realizar dos repeticiones en cada zona.
4. Adiós a las patas de gallo
Este es un ejercicio con el que podrás dar la fortaleza necesaria a la piel de los párpados inferiores para que no aparezcan las llamadas patas de gallo. Para realizarlo debes elevar tu mirada, manteniendo los ojos bien abiertos.
Con un dedo colocado en la zona del lagrimal y el otro en el extremo contrario del ojo. En esta posición debes intentar achinar los ojos, realizando presión como si fijaras la mirada para ver algo a lo lejos.
Cuando sientas la presión en el área del contorno del ojo, es que el ejercicio está funcionando. Repite este ejercicio cada vez que puedas, así evitaras que aparezcan las líneas de expresión llamadas patas de gallo. Si tienes mucho complejo, al igual que con las ojeras puedes aplicarte maquillaje y lucir resplandeciente.
Si te marcas una rutina para dedicarle tiempo a estos simples ejercicios de la cara para rejuvenecer el rostro en poco tiempo podrás apreciar resultados. Al igual que los ejercicios en el gimnasio, éstos deben complementarse con una buena alimentación y actividades saludables.