No hay nada como ser fiel a una misma. Tus gustos, tus creencias, tu manera de pensar y ver la vida. Todo eso, nuestra personalidad y nuestro carácter actúa como un reflejo a la hora de vestirnos.

A estas alturas ya sabemos que nuestra forma de vestir revela nuestra personalidad y precisamente por eso dicho reflejo debe dejarse ver en nuestro armario. ¿Por qué? Porque estaremos acertando en la elección de cualquier look. Así que toma nota, porque estas son las razones por las que deberías vestir según tu personalidad y te aseguramos que no te vas a arrepentir.

Nadie te conoce mejor que tú misma

Cuando vamos de compras, muchas veces, las dependientas intentan hacernos ver que algo que no va con nosotros nos queda bien. Si tienes muy clara cuál es tu personalidad en seguida te darás cuenta de qué prendas van mejor contigo, sin necesidad de la opinión de otras personas.

Todas las mujeres deberían eligir la ropa de esta manera porque así siempre nos sentiremos cómodas con lo que llevamos y esa comodidad se verá reflejada en nuestra actitud. No hay nada peor que ver a mujeres con ropa o tacones que no tienen nada que ver con ellas. El estilo algo mucho más allá de seguir las modas.

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La ropa habla por ti

Muchas veces no somos conscientes de lo que nuestra imagen proyecta sobre nuestra personalidad. Y es que vestir según tu personalidad te ayudará a comunicarte mejor con los demás. Ellos verán en tu ropa el fiel reflejo de tu personalidad. Aunque parezca mentira existe un psicología de la ropa. El tipo de prendas, cómo las combinas, los colores que prefieres, así como los complementos que usas son estudiados de forma automática por los demás. De todo ese conjunto se desprende una serie de datos que aportan información a las personas con las que interactúas. Por ello, no puedes obviar las razones por las que abusar de las prendas negras afecta a tu estado anímico a tu día a día.

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En el mundo de la psicología la ropa que elegimos habla sobre nuestra profesión, ambiciones, estado emocional, costumbres y personalidad. Por eso es tan importante elegir con cuidado cada prenda y no considerarla como algo frívolo y superficial. Las decisiones que tomemos a diario acerca de nuestra ropa van a influir en cómo nos sintamos con nosotros mismos cómo y nos perciben los demás. Todo es cuestión de percepción y precisamente por ello, seguir paso a paso estas razones para vestir en función de tu forma de ser hablarán de algo tan básico como el amor propio, y en definitiva de una mujer con autoestima y del sentido de afirmación.

No trates de ser quien no eres

Este suele ser un error a la hora de vestir que comenten muchas mujeres. Intentan resultar sexys cuando su personalidad es mucho más dulce o seductora. Tratan de vestir a la última moda cuando su actitud ante la vida es mucho más clásica, etc. Todo esto choca con la imagen que damos hacia el exterior.

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Por este motivo, es fundamental que siempre te pares a pensar cómo eres y con qué tipo de ropa te sientes más cómoda. Si vas a una fiesta con un escote de escándalo que no va con tu estilo, los demás lo notarán y tú no disfrutarás del evento. Se puede ser igual de sensual e incluso más, si sabemos escoger aquellas prendas que se ajustan mejor a nuestra forma de ser.

Rompiendo personajes

Ten en cuenta, que en el cine uno de los apartados más importantes es el del vestuario. ¿Por qué? Porque el vestuario ayudan a los actores a construir el personaje que tienen que interpretar. ¿Quieres ser un personaje o quieres ser tú misma? Rompe con las reglas y vístete según tu forma de vida. Este es el papel de tu vida y no tienes porque crear un personaje ficticio en torno a él.

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Estas son las ventajas de vestir según tu propia personalidad. Nunca trates de copiar el estilo de una amiga porque a ella le queda bien. Puede que consigas el efecto contrario, ya que ella es ella y tú eres tú. No hay nada más bonito en esta vida que ser una misma desde el principio y hasta el final ¿Te atreves? Si aún no has encontrado tu estilo es porque todavía no te conoces lo suficiente. Descubre tu personalidad y adapta tu ropa a ella.