La llamada crisis de los 40 o "crisis de la mediana edad" es un mito que engendrado por las premisas de una cultura, la pop, y el ensalzamiento de la juventud. El deseo de aferrarse a ella una vez superados los 40 es un fenómeno que se catalogó ya en los años 60 como “crisis de la mediana edad” o “crisis de los 40”. Un fenómeno que en la actualidad sigue vigente entre un alto porcentaje de la población de esa edad, al menos en el imaginario colectivo, ya que los especialistas consideran que no es una crisis como tal y sí unas actitudes que el marketing se ha encargado de consolidar. Así, los estudios actuales confirman que las personas son más felices a los 40 años que a los 18 algo que choca con lo que se entiende como crisis de la mediana edad. En este artículo te ofrecemos los mitos de la crisis de los 40 que debes desterrar.

Leyendas y creencias de la crisis de los 40

¿Te acercas a los 40 y te crea cierta desazón? ¿consideras que ya has consumido la mitad de tu vida y a partir de ahora es cuesta abajo? Si tus respuestas son afirmativas, entonces quizás te halles bajo la influencia de los estereotipos de la cultura del culto al cuerpo y la juventud de la mujer y no seas capaz de ver cuán afortunada o afortunado eres de haber llegado a esa edad y poder aceptarte y entrar en un momento de tu vida lleno de posibilidades e ilusiones renovadas.

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Entre mitos falsos sobre la crisis de los 40 más extendidos, encontramos los siguientes:

Los 40 suponen entrar en una fase de declive físico

Este mito sobre la crisis de los 40 depende mucho del tipo de vida que hallamos llevado a lo largo de nuestra vida y que, si bien es cierto que con el tiempo vamos cambiando, la madurez es algo natural y normal en la vida. Quizás aparezcan canas, las primeras arrugas o sea más difícil adelgazar y se sienta la necesidad de rejuvenecer de alguna manera, siendo habitual apuntarse a los gimnasios, tantear la posibilidad de hacerse un arreglo estético, mantener un estilo de vestir juvenil. Cada mujer tiene un estilo concreto para superar con éxito la crisis de los 40 y todo lo que te propongas.

La madurez también tiene su atractivo y cuidándose y manteniéndose activo se puede seguir disfrutando plenamente de la vida. Los especialistas en psicología señalan que verse superados por este tipo de sentimientos de declive son propios de personalidades inseguras y no en mujeres emocionalmente fuertes. Mantenerse activo y en forma, aceptarse y cuidarse son las claves para sentirse pleno a cualquier edad. Además, ten en cuenta que en lo que a inteligencia se refiere, el cerebro maduro es más flexible y creativo, siendo más sencillo controlar las emociones al tiempo que la experiencia nos ha hecho aprender a gestionar mejor nuestras relaciones sociales.

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Los 40 suponen el declive y el punto final de las ilusiones y proyectos juveniles

Este es otro de los falsos mitos sobre la crisis de los 40 dado que no tiene por qué ser así. En ese deseo de rejuvenecer se ve la vida estructurada y tranquila de los 40 como una perdida de aquellas ilusiones, proyectos e impulsos de la juventud. Se tiende a pensar que nunca se van a recuperar y algunas personas tienden a embarcarse en todo tipo de nuevas experiencias como salir con personas más jóvenes, desear romper con todas las responsabilidades adquiridas, dejar el trabajo, etcétera.

Esta sensación que nos invade puede responder también a un sentimiento de ansiedad ante la adquisición de un exceso de responsabilidades y sentirse de repente sobrepasados por ellas.  Por eso es interesante hacer un detox emocional y dejar a un lado la negatividad para dejar pasar al optimismo. Antes de romper con nuestra vida de forma drástica y tratar de vivir experiencias que no se pudieron experimentar en la juventud debemos repensar nuestra situación, redefinir nuestras metas y valorar hasta que punto no estamos idealizando la juventud potenciando solo los aspectos positivos, sin ser conscientes de los obstáculos y dificultades que entonces atravesamos.