El estrés es un estado de gran tensión nerviosa originado por el exceso de trabajo, las aspiraciones no satisfechas y otras preocupaciones. Suele manifestarse desde la fatiga prolongada hasta dolores de cabeza, gastritis, úlceras y en casos más avanzados trastornos psicológicos. Por ello, aprende a prevenirlo con estos consejos:
• Reconócete a ti mismo: No te exijas demasiado. Pide lo que te pueden dar.
• Localiza el origen del estrés: ¿Qué genera tensión en tu cuerpo? Reconocerlo será el primer paso en su manejo y control.
• Cuida tu alimentación: No tomes café, no fumes tabaco y olvídate del alcohol, pues potencian el estrés.
• Haz ejercicio: Te ayudará a relajarte.
• Aprende a contar lo que te pasa: Ten confianza en las personas que consideras valiosas y cuéntales lo que piensas y cómo te sientes. Te ayudará a eliminar esas molestias o pesares.
• Practica el optimismo: Elimina a los fantasmas de tu mente.
• Aprende a decir NO: ¡Importante! aprende a reconocer tu espacio, así evitarás el sentimiento de culpa y tendrás mayor control de ti misma.