A todas nos gusta estar en forma, ya que un buen estado físico nos proporciona múltiples beneficios, como sentirnos más ágiles y también más atractivas y a gusto con nuestro propio cuerpo. Pero, ¿alguna vez te has preguntado si tu rutina de entrenamiento en el gimnasio funciona en términos de rendimiento y aprovechamiento?
Para que el esfuerzo realizado no termine en una pérdida de tiempo y los objetivos fallidos no desalienten tu intención de lograr grandes metas en tu rutina de entrenamiento, te presentamos a continuación 5 consejos para que tu estancia en el gimnasio obtenga sus frutos:
- Asegúrate de proporcionar el descanso necesario a tu cuerpo entre cada serie sin exceder el tiempo en reposo. No dejes pasar más de dos minutos entre serie y serie a fin de garantizar el trabajo en tus músculos.
- Siempre ten en cuenta el peso a levantar. El entrenamiento para brazos no siempre requiere cargas pesadas, pues el desarrollo muscular no está relacionado con el desarrollo de la fuerza; en este y otros entrenamientos lo más importante es aplicar la técnica adecuada, en algunos gimnasios puedes encontrar especialistas que te pueden guiar en estas rutinas.
- Obtén una rutina semanal y evita un esfuerzo máximo para recuperar los días perdidos, de igual forma, enfócate en un plan de ejercicios con la ayuda de un profesional para ajustarlo a tus progresos y necesidades.
- Es importante realizar un estudio médico previo a fin de evitar ejercicios que puedan resultar contraproducentes. Lo esencial es realizarse un electrocardiograma para conocer el esfuerzo máximo del que somos capaces al entrenar, sin comprometer el corazón.
- Cuida tu hidratación, se deben considerar pequeños sorbos de líquido durante la rutina. Pero hay que tener siempre en cuenta que la hidratación debe ser antes, durante y después de ir al gimnasio, cuando aún se sigue perdiendo líquido.
Cabe destacar que el mejor consejo para obtener un buen rendimiento en el gimnasio es ejercitarte con una buena actitud, pues una actitud positiva es sinónimo de inspiración, disposición y entusiasmo para lograr los objetivos propuestos.