¿Todavía no conoces los lienzos personalizados? Se trata de un tipo de impresión que se ha vuelto muy popular en los últimos años, ya que es una gran opción para inmortalizar cualquier imagen. Si estás pensando en hacer un detalle original y personalizado, este tipo de lienzo será todo un acierto y seguro que le encantará a la persona a la que se lo regales.

La fotografía digital ha facilitado que podamos tomar imágenes en cualquier parte y conservarlas en las memorias de nuestros dispositivos. Pero, por desgracia, no siempre las almacenamos y es posible que se pierdan con el paso del tiempo. Sin embargo, un lienzo o un fotolienzo puede ser la opción ideal, puesto que te permitirá quedar bien en cualquier situación y es una manera perfecta de almacenar tus imágenes y fotografías.

¿Cómo hacer un lienzo personalizado? Consejos a seguir

Ahora que ya sabes lo interesante que es este tipo de regalo, te mostramos algunos consejos que te permitirán diseñarlo de forma fácil y rápida:

1. Elección de la imagen adecuada

Lo primero que tendrás que hacer es seleccionar la foto más adecuada. De entre todas las disponibles, escoge una foto especial que te guste y que quieras recordar e inmortalizar. Las mejores fotos son aquellas que producen un sentimiento especial, hasta el punto de cambiar por completo el sentido de la habitación. Por ejemplo, una imagen del nacimiento de nuestro hijo, de un aniversario, una foto de viaje o una fotografía familiar.

2. Ten en cuenta el formato y la calidad

Ahora viene el momento de configurar las opciones de la impresora. Por una parte, tendrás que considerar el tamaño del lienzo. Fíjate en la fotografía que vayas a imprimir, ya que el tamaño será muy diferente. Por tanto, deberás definir el tamaño y el formato en función de la calidad de la imagen y el lugar en el que se vaya a colocar. Algunos de los formatos disponibles y más populares son estos: 40 x 30 cm, 40 x 40 cm, 50 x 70 cm, así como 70 x 70 cm.

De la misma manera, también importa la calidad. Debes tener en cuenta que no sirve de nada marcar la máxima calidad posible en el servicio de impresión, si la calidad de la imagen no es alta.

3. Previsualización

Cada vez que hagas un nuevo ajuste, deberás hacer una previsualización y así comprobar que la imagen queda perfecta.  Con ello, podrás realizar los ajustes que necesite la imagen. Ten en cuenta que cualquier cambio podría descuadrarlo todo y esto podría ser un desastre una vez se mande a impresión. Por ello, revisarlo previamente resulta un aspecto fundamental. Dedícale tanto tiempo como necesites y fíjate hasta en los más pequeños detalles, ya que serán los definitivos.

4. Pide consejo si lo necesitas

Si ves que no estás consiguiendo el resultado que esperas o si se está complicando la tarea en algún momento, lo más recomendable es pedir ayuda. De este modo, con la ayuda de un profesional experto en imagen e impresión, podrás conocer el tamaño del lienzo que mejor se adapta a la imagen o cuál es la calidad más adecuada.

5. Solicita el lienzo con la suficiente antelación

La mayoría de las empresas suelen tener el lienzo en unos pocos días. Pero, si te urge, haz el pedido con un margen de tiempo suficiente para que esté listo para la fecha que lo necesites. Sobre todo, si son fechas especiales, como festivos o Navidad.

Con todos estos consejos, podrás crear un lienzo perfecto que se convertirá en el regalo ideal para tus seres queridos.