Tener una piel suave y libre de vello es uno de los principales objetivos estéticos de muchas personas. Actualmente, existen muchos tipos de depilación. Algunos eliminan el vello de forma definitiva y otros son más adecuados para pieles muy sensibles y con problemas dermatológicos.
Si necesitas información sobre las diferentes modalidades de depilación a los que puedes recurrir y cuáles son los más adecuados para tu tipo de piel, en depilacionyafeitado.com puedes conocerlos con mayor detalle. A continuación, te explicamos cuáles puedes encontrar y sus principales diferencias. ¡Empezamos!
Sistemas de depilación para cada tipo de piel
Desde los métodos y técnicas más tradicionales, como la cera o el afeitado, hasta los métodos tecnológicamente más avanzados, como el láser o la depilación de luz pulsada. Descubre qué tipo de depilación se adapta mejor a tu piel:
Cera
La cera es, desde hace décadas, un método de depilación versátil y efectivo. Además, con la cera, se puede conseguir lucir una piel suave y sin vello hasta tres semanas después del depilado.
Sin embargo, conviene recordar que este método de depilación no es el más adecuado para piel atópica o sensible, pues puede provocar enrojecimiento e irritación en la piel. Además, otra de las desventajas del uso de cera caliente es que puede provocar quemaduras si no se controlan bien los tiempos de enfriado.
Pero, a nivel general, las principales ventajas de este método de depilación son:
- Es una opción económica.
- Se consiguen resultados bastante duraderos.
- El uso prolongado de la cera debilita progresivamente el crecimiento del vello.
Cuchilla de afeitar
La cuchilla de afeitar es uno de los métodos de depilación más populares tanto en hombres como en mujeres. Sobre todo, es la opción que eligen aquellas personas que buscan depilarse rápidamente y que no quieren sentir ningún tipo de dolor.
No obstante, la depilación con cuchilla de afeitar no ofrece unos resultados duraderos, puesto que el vello vuelve a aparecer dos o tres días después de depilarlo. Además, si la cuchilla no está bien afilada, puede provocar irritación y granitos en la piel.
Maquinilla eléctrica
Las maquinillas o rasuradoras eléctricas son aparatos formados por una hoja rotatoria que se desliza a lo largo de la piel y que funcionan a través de una batería recargable. Este tipo de dispositivos atrapan y cortan el vello que está sobre la superficie de cualquier parte del cuerpo.
Por ello, se trata de una alternativa ideal para personas que tienen la piel sensible y que buscan remover el vello desde la raíz, evitando los molestos tirones de la cera convencional. Además, las rasuradoras eléctricas son muy sencillas de utilizar y las de última generación se pueden, incluso, usar sobre piel húmeda.
Los resultados que ofrece una maquilla eléctrica suelen durar unas tres semanas. Y, al igual que la cera, su uso prolongado debilita el crecimiento del vello, por lo que cada sesión de depilado va resultando más indolora.
Láser y luz pulsada
La depilación láser es el sistema más moderno y revolucionario. Tiene una técnica perfecta para aquellos que quieren pasar un largo periodo de tiempo sin preocuparse de la aparición del vello corporal. Y es que, este moderno método ha sido concebido para inhibir o retrasar el crecimiento del vello durante unos meses e, incluso, durante años. Sin embargo, no es el método más adecuado ni el más efectivo para pieles claras o para personas que tienen canas blancas o grises.
En el caso de las IPL, lámparas de luz pulsada, estas funcionan de forma similar al láser. Sin embargo, utilizan luz de amplio espectro, lo que ofrece resultados más duraderos en las personas que tienen el vello más oscuro.
En función de tu tipo de piel y tus necesidades, podrás recurrir a un método de depilación u otro. ¿Ya sabes cuál encaja mejor contigo?