El descanso es un elemento esencial para tener un buen estado de salud. Mientras dormimos, el organismo segrega melatonina, una hormona que interviene directamente en la regulación de nuestro sistema inmune.
La cantidad de sueño y descanso que necesita cada persona depende, básicamente, de su edad. Por ello, los expertos recomiendan un descanso medio de entre siete y ocho horas por noche en el caso de los adultos. Mientras, se aconseja una media de entre 10 y 13 horas en el caso de los niños.
Cuando un adulto descansa menos de siete horas o el descanso no es el adecuado, tiene más probabilidades de sufrir algunas molestias. ¡Comentamos cuáles son y cómo evitarlas!
Molestias que aparecen si no descansas de forma adecuada
Repasamos los problemas más frecuentes que surgen cuando existe un mal descanso:
Molestias musculares y cervicales
Los colchones y somieres son un elemento muy importante a la hora de conseguir el descanso que necesitamos. Y es que, no vale con descansar en cualquier colchón, sino que este debe adaptarse a la fisionomía de cada persona.
Pero, además de la calidad del colchón, otro de los aspectos en los que debemos fijarnos es en su duración, ya que todos no tienen la misma vida útil. En este sentido, se estima que la vida útil de un colchón de buena calidad suele oscilar entre ocho y diez años. Se debe tener en cuenta que cada persona puede pasar sobre él un periodo medio diario de entre seis y ocho horas.
Cuando no descansamos en el colchón o con la almohada adecuados, empiezan a aparecer molestias de tipo muscular y cervical. Esto es debido a que los colchones y las almohadas deben ajustarse a las necesidades y morfología de cada persona.
Por tanto, un aspecto clave es obtener un colchón, base y almohadas de calidad, como proporciona Bed's. Se trata de una cadena tiendas de colchones que tiene más de 35 años de experiencia en el sector del descanso. Cuenta con más de 180 puntos de venta en España y trabaja con primeras marcas, como Pikolin, Smattex, Lattoflex o Epeda. Ofrece 30 noches de prueba y proporciona atención especializada para elegir un colchón ideal en función de las necesidades de cada persona para obtener un equipo de descanso que se adapte a ti.
Insomnio
Otra de las molestias frecuentes que surgen cuando no descansamos bien es el insomnio y los problemas de sueño. El insomnio nos ocasiona falta de energía y de vitalidad para asumir las tareas del día a día.
Tendencia a la depresión y a la ansiedad
Además del aspecto físico, nuestra salud mental también se ve afectada cuando no descansamos bien. Y es que, la falta de descanso suele influir de forma directa en todos los cambios anímicos que sufrimos.
No proporcionarle al cuerpo un buen descanso influye directamente en la segregación de algunas hormonas que son importantes para la salud. Como, por ejemplo, el cortisol, la prolactina o la serotonina, que son las hormonas que están directamente relacionadas con la regulación del ciclo del sueño.
Por lo tanto, cuando descansamos mal, nuestras emociones también se ven afectadas y la somnolencia nos produce alteraciones en nuestro comportamiento.
Obesidad y diabetes
Las personas que no descansan bien tienen más probabilidades de sufrir enfermedades como la obesidad y la diabetes. Esto es debido a que, cuando no dormimos bien, el organismo produce más cantidad de una hormona llamada ghrelina, que incrementa el apetito.
Por este motivo, si dormimos poco o descansamos mal, aumenta también el riesgo de ganar peso. Esto hará que tengamos más hambre y cambiaremos nuestros hábitos alimenticios.
Estudios recientes apuntan, además, que dormir menos de seis horas diarias disminuye la capacidad para tolerar la glucosa, por lo que nos volvemos más vulnerables a padecer diabetes tipo 2.
Enfermedades del corazón
Otro de los problemas asociados al mal descanso es que el organismo es más propenso a tener aterosclerosis. Este problema de salud genera acumulaciones de colesterol en las arterias. Ello incrementa de forma significativa el riesgo de padecer enfermedades del corazón.
Enfermedades neurodegenerativas
Estudios científicos también han puesto en evidencia que las personas que descansan mal sufren un empeoramiento de las funciones cognitivas, por lo que son más propensas a sufrir enfermedades del sistema nervioso central.
Como hemos podido ver, un buen descanso es esencial para mejorar nuestra salud, ser más productivos y evitar la aparición de ciertas enfermedades.