¿Cuánto? ¿Hasta qué punto?
Esas son las dos preguntas que más me he hecho últimamente cuando pienso sobre las grandes firmas y los desorbitados precios de sus prendas y accesorios.
¿Hasta donde estaríamos dispuestos a pagar por un par de Louboutins?
¿Cuál es la línea que separa el gusto por un cierto bolso o el mero vicio? ¿Dónde está la barrera de lo aceptable y lo excesivo?
Muchas fashionistas y trendsetters se echaron las manos a la cabeza el pasado verano al saber el precio de las camisetas con agujeros de Balmain, pero ¿Qué esperabais?
La verdad es que hoy en día nada nos deja fuera de combate, ¿Que Cristophe Decarnin quiere vender sus camisetas por el precio que muchas personas comen un mes entero?, no pasa nada, al final la prenda en cuestión acabará teniendo lista de espera por mucho revuelo que cause el precio a pagar en un principio.
¿Qué es lo que nos mueve hoy en día? ¿Tenemos algo en nuestro interior que nos incita a comprar más y más? ¿Ejercen los logos un efecto atrayente en nuestras mentes?
Aunque no todo se reduce a la doble C de Chanel o a la famosa suela roja ya que este caso también se puede trasladar al resto de los mortales que compramos en Inditex y compañía, ¿Cuánto estáis dispuestos a pagar cada temporada por ir a la moda?
Y cambiando un poco de tercio, no se que va a ser de los H&M cuando se ponga a la venta la colección diseñada por Alber Elbaz, será algo así como el fin del mundo, ya que después de lo visto con Jimmy Choo me da que pensar que la gente sacará su instinto animal y harán caso a aquello de “solo sobrevive el más fuerte” ¿No creéis?
Si al final no hay nada mejor que un par de prendas “más o menos exclusivas” para movilizar a las masas.
A lo dicho… no hay nada que nos pare.
I have just uploaded a new outfit to Chicisimo, if you want, you can see it here.
How much? Up to what point?
These are the two questions that I have wondered the most lately when I think about big brands and the astronomical prices of their clothes and accessories.
Up to what would we be willing to pay for a pair of Louboutins?
Which is the line that separates the taste for a certain handbag or the mere vice? Where is the wall of the acceptable and the excessive?
Last summer lots of fashionists and trendsetters dropped their jaws after knowing the price that the riddled with holes tees had but, what did you expect?
The truth is that nowadays nothing let us knocked out, if Cristophe Decarnin wants to sell his t-shirts for a price that some people eats a whole months, it doesn’t matter, the item will finish with a long waiting list.
Which is the thing that makes us move nowadays? Have we something inside that incites us to buy more and more? Do the logos exert some influence on out minds?
Although not everything is reduced to Chanel’s double C or the famous red sole, this can be transferred to the rest of the mortals that buy in Inditex &co, how much are you disposed to pay every season to go on fashion?
And letting this to one side, I don’t know what will happen with the H&M when the collection designed by Alber Elbaz will be on sale, it will be something like the end of the world I think, because after seeing what happened with Jimmy Choo it makes me thing that people will show their animal instinct and will follow the ‘the strongest is the one who survives’ don’t you think?
There is nothing better than a pair of items ‘more or less exclusive’ to mobilize the masses.
As I said… anything stops us.